1 jun 2005

MUCHA ATENCIÓN: editorial de El Tiempo

"Las condiciones de impunidad que pretenden alcanzar los paramilitares resultan afrentosas para las víctimas y para la justicia en Colombia. Por eso lamentamos que las FARC no hayan aprovechado el anterior proceso del Caguán para desmovilizarse y permitir a las fuerzas estatales dedicarse a castigar a las llamadas autodefensas y a 'purgar' en su interior todo rastro de complicidad. No obstante, insistimos en exigir a las guerrillas que inicien un proceso de desmovilización para que los partidarios de conceder impunidad a los paramilitares no tengan la excusa de que dedicar el ejército a quitarle obstáculos a la guerrilla favorecería el avance de ésta, y por tanto el resurgimiento de resistencia 'informal', con sus secuelas de horror."

Bonito, ¿no?

Pues no, ése es un Editorial apócrifo, que me he inventado yo, claro está, pues El Tiempo JAMÁS ha pedido a las FARC que se desmovilicen. Por el contrario, hace presión para que se alcance la "solución negociada".

Perdonen que lo diga otra vez: los-crímenes-guerrilleros-sólo-son-un-instrumento-de-la-solución-negociada. Sin secuestros ni masacres no habría nada que negociar.

Por lo demás, el verdadero EDITORIAL me deja con una duda: ¿cómo es eso de que a la hora de impedir que deje de haber dos bandas asesinas (porque en tal caso los pupilos de El Tiempo se quedarían con toda la carga de ignominia e ilegitimidad), se recurre a EE UU?

La clase de cretinismo moral de los lectores de ese periódico es una especie de "doblepensar" macondiano: ahora la "injerencia" estadounidense y la guerra contra las drogas son cosas buenas. ¿Cómo hay que explicar que sin esa continua CORRUPCIÓN DEL LENGUAJE Colombia habría dado grandes pasos hacia la paz y el desarrollo? La guerrilla es un problema secundario, una secuela vulgar. El problema es la sarta de mentiras en que creen los colombianos de estratos altos.

(Aclaración: "doblepensar" es lo que hacían los personajes del infierno totalitario de la novela de George Orwell 1984, obra de la que también sale la caracterización de El Tiempo como "Ministerio de la Verdad".)

3 comentarios:

Ruiz_Senior dijo...

Hombre, Ultraninja: para eso yo también soy lector de El Tiempo y no tengo muchas ganas de insultarme a mí mismo. Me parece que queda claro que me refiero al tipo de gente que se identifica con el discurso de los dueños y directores de ese periódico.

Usted tiene obsesión por Molano pero tal vez sea porque no le presta atención a los demás columnistas de El Espectador, como Cepeda II, Camacho Guizado, Marianne Ponsford, Lisandro Duque, Iván Marulanda y algún otro, que en todo caso no alcanzan el nivel de demagogia y bajeza de los de Semana, pues Caballero y Coronell hacen digno y decente a Molano.

Anónimo dijo...

Pues es el mismo doble pensar que comentaba en el blog de atrabilioso a ultraninja, los colombianos son antigringos pero al mismo tiempo copian todo lo de este pais.

Seria muy ironico que si todo el proceso con las auc sale bien y les siguen las farc, por las mismas razones de mejores beneficios que en otras negociaciones, resulten entonces presionando a las farc con la injerencia y guerra contra las drogas, para que no se desmovilizen. Si entiendo correctamente lo que comenta, lo del 'doble pensar' significa una espada de doble filo: en un caso la injerencia usada para favorecer el que los grupos armados tengan apoyo de las masas y en otro para impedir que el gobierno las desmovilize?

Ruiz_Senior dijo...

Exactamente, Mary T., cuando algo conviene a sus fines se vuelve bueno y casi automáticamente, según las órdenes de arriba, del Ministerio de la Verdad el amigo se vuelve enemigo y viceversa. Ahora EE UU es un aliado para impedir que las AUC se desmovilicen.

1984 es en cierta medida una caricatura del comunismo y del régimen soviético, y eso del doblepensar ya se conoció en la época: después de estar 20 años en guerra con el fascismo, de repente, a causa del pacto Molotov-Ribbentrop Hitler se volvió bueno y los comunistas en todo el mundo aplaudieron la invasión compartida de Polonia.

Ahí se trata de una humanidad degradada por la máquina de terror, en Colombia es el servilismo y el aislamiento lo que permite una degradación semejante.