En 1851 Richard Wagner le escribió a su amigo y mentor Ferenç Liszt una carta en la que describía el plan de su tetralogía El anillo del Nibelungo, ese inacabable ladrillo musical que tanto desprecia el germanista Alfonso Gómez Méndez. Ésta fue la respuesta de Liszt:
Tu consigna debe ser la misma que dio el capítulo de Sevilla al arquitecto respecto a la construcción de la catedral: «Haz un templo tal que las futuras generaciones tengan que decir: “El capítulo habría de estar loco para emprender una cosa tan extraordinaria”». Y ahí está la catedral.
______Es muy llamativo que Liszt buscara una imagen del pasado, aun de un pasado remoto, pues la anécdota data de 1401, y por lo demás lo que dijeron los miembros del capítulo fue: «Hagamos una iglesia que nos tengan por locos». Tanto cambian las cosas de una traducción a otra. Con todo, el sentido permanece: esa audacia de emprender lo nunca visto, disponiéndose a afrontar precisamente la humillación, el fracaso, la miseria, etc. Lo que pasó en el siglo siguiente en Europa se puede resumir en la audacia asombrosa, admirada hasta el delirio en lugares como nuestro maltratado país, que proclamaron los vándalos del mayo del 68: «Seamos realistas, pidamos lo imposible».
______Y es que ciertas cabezas se han dejado engolosinar por el tentador adjetivo: «imposible». Ya explicaré después que viene a significar realmente eso. De momento vale la pena fijarse en que nadie ha visto el menor problema en ese verbo: «pidamos». De los que admiraban a aquellos que querían hacer algo tan grande que les resultaría grato ser tomados por locos se pasó a unos locos que no tienen mejor ocurrencia que pedir.______
Tu consigna debe ser la misma que dio el capítulo de Sevilla al arquitecto respecto a la construcción de la catedral: «Haz un templo tal que las futuras generaciones tengan que decir: “El capítulo habría de estar loco para emprender una cosa tan extraordinaria”». Y ahí está la catedral.
______Es muy llamativo que Liszt buscara una imagen del pasado, aun de un pasado remoto, pues la anécdota data de 1401, y por lo demás lo que dijeron los miembros del capítulo fue: «Hagamos una iglesia que nos tengan por locos». Tanto cambian las cosas de una traducción a otra. Con todo, el sentido permanece: esa audacia de emprender lo nunca visto, disponiéndose a afrontar precisamente la humillación, el fracaso, la miseria, etc. Lo que pasó en el siglo siguiente en Europa se puede resumir en la audacia asombrosa, admirada hasta el delirio en lugares como nuestro maltratado país, que proclamaron los vándalos del mayo del 68: «Seamos realistas, pidamos lo imposible».
______Y es que ciertas cabezas se han dejado engolosinar por el tentador adjetivo: «imposible». Ya explicaré después que viene a significar realmente eso. De momento vale la pena fijarse en que nadie ha visto el menor problema en ese verbo: «pidamos». De los que admiraban a aquellos que querían hacer algo tan grande que les resultaría grato ser tomados por locos se pasó a unos locos que no tienen mejor ocurrencia que pedir.______
Las recientes manifestaciones en Francia, así como las elecciones en Alemania expresan claramente ese cambio, de lo que tendría que venir después del mayo del 68: la borrachera de estatismo y falta de iniciativas, que se manifiesta en hechos como que en las últimas elecciones francesas suele haber una mitad de los votantes que apoyan a candidatos hostiles al sistema democrático.
______Cierto conjunto de lealtades sentimentales y estéticas llevan a muchos a pensar que los trotskistas son el extremo opuesto de Le Pen, pero en la práctica están siempre en el mismo bando, contra Bush y contra la Constitución Europea, contra las privatizaciones y contra la inmigración y el libre mercado. Sólo cambia el fetiche que venden, mientras que los nostálgicos del verdadero comunismo venden el odio a Bush y al capitalismo, los nostálgicos de los lager venden el antisemitismo y el odio a la inmigración.
______Ante esa abrumadora mayoría, los liberales apenas si pueden proponer nada. Es muy llamativo que en Francia todos los sectores políticos importantes son estatistas, como si ese apego a las empresas públicas fuera ya un sobreentendido de la política y la administración. Justo al contrario de lo que ocurre en el Reino Unido, donde cualquiera que propusiera el retorno a la forma de gobernar anterior a Thatcher tendría escasísimo apoyo. Donde ser liberal ya es algo que se presupone en un gobernante.
______Da casi risa oír las protestas de los franceses por el desempleo y la pobreza. Suenan grotescas si se comparan sus condiciones con las de los colombianos; más o menos como si se comparan las condiciones de los colombianos con las de la gente de Asia, más de la mitad de la humanidad. Las reformas pendientes sencillamente empezarían por abolir la semana de 35 horas, por privatizar varias empresas públicas deficitarias, por reducir y condicionar el seguro de desempleo, por limitar las pensiones, etc. Pero los votantes ya están acostumbrados a la buena vida y no entienden cómo es que algo, como las manufacturas chinas, los productos culturales estadounidenses o los vinos y quesos de otras regiones de la misma Europa, viene a quitarles ese bienestar asegurado.
______Otro tanto pasa en Alemania, donde sencillamente es imposible convencer a la gente de que la integración con el Este de Europa supone que muchos empleos se irán a esos países, o bien que hay que aumentar drásticamente la competitividad y limitar los sueldos, que para un colombiano son como parte de una leyenda. ¡Ya no están para hacer nada que los lleve a ser tomados por locos!
______Eso era lo que expresaba el «pidamos lo imposible», la fatiga de sociedades que encontraron «esa permanente y segura posibilidad de conseguir todo —sin esfuerzo, lucha, duda, ni riesgo— sin mas que tocar el resorte y hacer funcionar la portentosa máquina» (el Estado).
______Y lo triste es que el audaz lema de 1968 se va haciendo día tras día realidad: por poco que pidan, cada vez más, será algo imposible.
______Cierto conjunto de lealtades sentimentales y estéticas llevan a muchos a pensar que los trotskistas son el extremo opuesto de Le Pen, pero en la práctica están siempre en el mismo bando, contra Bush y contra la Constitución Europea, contra las privatizaciones y contra la inmigración y el libre mercado. Sólo cambia el fetiche que venden, mientras que los nostálgicos del verdadero comunismo venden el odio a Bush y al capitalismo, los nostálgicos de los lager venden el antisemitismo y el odio a la inmigración.
______Ante esa abrumadora mayoría, los liberales apenas si pueden proponer nada. Es muy llamativo que en Francia todos los sectores políticos importantes son estatistas, como si ese apego a las empresas públicas fuera ya un sobreentendido de la política y la administración. Justo al contrario de lo que ocurre en el Reino Unido, donde cualquiera que propusiera el retorno a la forma de gobernar anterior a Thatcher tendría escasísimo apoyo. Donde ser liberal ya es algo que se presupone en un gobernante.
______Da casi risa oír las protestas de los franceses por el desempleo y la pobreza. Suenan grotescas si se comparan sus condiciones con las de los colombianos; más o menos como si se comparan las condiciones de los colombianos con las de la gente de Asia, más de la mitad de la humanidad. Las reformas pendientes sencillamente empezarían por abolir la semana de 35 horas, por privatizar varias empresas públicas deficitarias, por reducir y condicionar el seguro de desempleo, por limitar las pensiones, etc. Pero los votantes ya están acostumbrados a la buena vida y no entienden cómo es que algo, como las manufacturas chinas, los productos culturales estadounidenses o los vinos y quesos de otras regiones de la misma Europa, viene a quitarles ese bienestar asegurado.
______Otro tanto pasa en Alemania, donde sencillamente es imposible convencer a la gente de que la integración con el Este de Europa supone que muchos empleos se irán a esos países, o bien que hay que aumentar drásticamente la competitividad y limitar los sueldos, que para un colombiano son como parte de una leyenda. ¡Ya no están para hacer nada que los lleve a ser tomados por locos!
______Eso era lo que expresaba el «pidamos lo imposible», la fatiga de sociedades que encontraron «esa permanente y segura posibilidad de conseguir todo —sin esfuerzo, lucha, duda, ni riesgo— sin mas que tocar el resorte y hacer funcionar la portentosa máquina» (el Estado).
______Y lo triste es que el audaz lema de 1968 se va haciendo día tras día realidad: por poco que pidan, cada vez más, será algo imposible.
8 comentarios:
"sin más que tocar el resorte y hacer funcionar la portentosa máquina» (el Estado).". Pequeño error ortográfico a la vista.
Bueno, yo he visto que al final es más lo que une a fascistas y comunistas, que lo que los separa. Como uno no puede tildar de "comunista" a todo aquel que pregone la antiprivatización y el aumento del gasto público desde una posición que coquetea con la subversión sin que éste brinque molesto por haberlo acercado a las guerrillas, ve que surge repentinamente una gama de "matices": "yo no soy comunista, soy marxista". "No, yo soy maoísta". "Yo soy socialdemócrata". "Yo soy socialcristiano". "Ecologista, presente". En fin, hay un rasgo que los identifica en gran manera a todos ellos, y a los tradicionales fascistas también: el estatismo e incluso el nacionalismo.
Si bien en la primera mitad del siglo XX hubo una diferencia irreconciliable entre el comunismo y el nacionalsocialismo, hoy en día esta diferencia apenas persiste en un recuerdo rencoroso de la invasión de Hitler a la Unión Soviética, pero más allá de la divergencia entre la xenofobia y antisemitismo con respecto al igualitarismo y la restricción a la propiedad privada, vemos que se perfila un escenario de similitudes, como Jaime anuncia: el enemigo común, Estados Unidos, y todo lo que representa: sociedad abierta, sociedad libre en todos los sentidos.
No en vano Chávez protagoniza la payasada de pararse en el Monte Sacro y delante de algunos delegados europeos, decir que al Parque de la Libertad (un nombre con que se conoce la montaña), debería llamársele de otra forma (Parque de la Libertad y la Igualdad), ya que el nombre oficial le recuerda molestamente el monumento que la eufórica Francia postrevolucionaria regaló a la bahía de Nueva York como saludo conmemorativo de la independencia de Estados Unidos.
Aunque Hitler murió física y políticamente hace décadas, entonces tuvo cierto interés en vincular al mundo musulmán a su causa. Nada raro resulta ahora ver a los comunistas guiñarles el ojo a los fundamentalistas dejando atrás el episodio de la invasión soviética a Afganistán. Mientras sea más poderoso el sentimiento que los une, que las diferencias que los diversifica, veremos más y más estatistas con la cabeza rapada, luciendo camisetas del Ché Guevara, o disparando rifles al aire cada vez que quieran celebrar hasta las bodas.
Y como dijo el cerdo, como dijo Hitler, como dice Chávez, "pero unos somos más iguales que otros".
Este artículo esta viciado por los usuales mentiras y falsas generalizaciones del señor Ruiz:
1- El hecho de que la extrema derecha y la izquierda (extrema o no) se opongan a ciertas cosas en común, poco tiene que ver con que sigan las mismas motivaciones. Le Pen tiene tan poco que ver con lo que pasó en Mayo del 68 o con los ideales de la nueva izquierda, como Jaime Ruiz o Ronald Reagan representan el verdadero liberalismo político.
2- La izquierda está lejos de ser un bloque monolítico como estúpidamente no lo quisiera hacer creer el "Dr" Ruiz. De hecho podríamos dividirla en tres grandes grupos: la izquierda de corte marxista leninista o maoísta, defensora de un modelo de control absoluto a través de lo estatal de la economía y la vida pública. En segundo lugar la izquierda social demócrata, como la que construyó el estado de Bienestar en Europa y en parte en Estados Unidos (y que aún funciona bastante bien en muchos países, asi no lo quieran aceptar los derechistas como el autor de este blog). Esa izquierda al igual que la del primer tipo está fragmentada en varios grupos, pero acepta la idea de un "socialismo de mercado", es decir, uno donde el estado no controle la mayoría sino unos aspectos específicos de la vida económica. Finalmente está una izquierda verdaderamente anti estatal, constituida por los anarquismos de diversa índole. Curiosamente esa izquierda está mucho más cercana de los ideales del liberalismo - término del cual se han apropiado ideólogos chimbos como los neoconservadores en USA, cuya retórica Ruiz emula tan poco originalmente-.
En mi opinión la primera de esas izquierdas es una perversión de la misma, y concluyó en los experimentos fracasados del llamado “socialismo real”. La segunda obedecía a unos ideales muy atractivos y pudo construir a través del estado un modelo admirable de sociedad. El problema, claro está, es que el Estado surgió para servir los intereses del capitalismo, y una vez pasó la coyuntura propicia para que el estado de bienestar surgiera (el terror de la derecha y el capital a la revolución Rusa y al comunismo Soviético) este se empezó a derrumbar. La izquierda fue ilusa al pensar que podía construir el socialismo a través del Estado, además porque el Estado se basa en un principio que es esencialmente anti izquierdista: la coerción. Quizás ahora sea el turno para una izquierda alternativa, de corte anarquista y voluntaria (socialismo voluntario del que hablaba Benjamín Tucker, líder libertario y anarquista del siglo XIX) para combatir el estatismo y el capitalismo, que parecen una sola cosa, mientras sus dirigentes se pretende “liberales y demócratas” (como el señor Ruiz, que apoya a los dictadores de la escuela de las americas, simplemente porque “combatían el comunismo” en nombre de la “libertad”, tal como la entendían los gringos).
La respuesta de Sergio Méndez está viciada por los usuales hábitos intelectuales del Homo mamertensis, el más característico de los cuales es la decretitis, la creencia en que un adjetivo o una acusación demuestran algo. ¿Cuáles son mis mentiras? ¿Cuáles son mis "falsas generalizaciones"?
1- El hecho de que la extrema derecha y la izquierda (extrema o no) se opongan a ciertas cosas en común, poco tiene que ver con que sigan las mismas motivaciones. Le Pen tiene tan poco que ver con lo que pasó en Mayo del 68 o con los ideales de la nueva izquierda, como Jaime Ruiz o Ronald Reagan representan el verdadero liberalismo político.
Claro, generalizando así sale siempre algo exacto: Le Pen y Cohn Bendit se oponen a la música esa que parece una lavadora, aborrecen los rábanos, etc. Los enemigos del sistema democrático no tienen las mismas motivaciones ideológicas, pues unos vienen del patrioterismo racista, antisemita y conservador y los otros de la utopía situacionista o de cualquier borrachera de ésas. Pero en cambio sí tienen las mismas motivaciones sociológicas y aun morales: el mundo exterior con su lógica distinta amenaza igual al sueño de volver con Joseph de Maistre al culto de Juana de Arco y al falansterio cañamoso y orgiástico. A la larga, por los motivos que sean, unos y otros (no los dirigentes, pero sí los votantes) terminan apoyando a Chirac, que es el hombre que podría salvar la situación mediante unos contraticos con Sadam, o con Putin, o con los iraníes, o con los saudíes, o con los chinos... Tanto la República de Charles Maurras como la Revolución Permanente tienen un enemigo común, el mundo moderno, la triste realidad del declive de Francia, la complicidad general en hechos tan admirables como el genocidio de Ruanda.
2- La izquierda está lejos de ser un bloque monolítico como estúpidamente no lo quisiera hacer creer el "Dr" Ruiz. De hecho podríamos dividirla en tres grandes grupos: la izquierda de corte marxista leninista o maoísta, defensora de un modelo de control absoluto a través de lo estatal de la economía y la vida pública. En segundo lugar la izquierda social demócrata, como la que construyó el estado de Bienestar en Europa y en parte en Estados Unidos (y que aún funciona bastante bien en muchos países, asi no lo quieran aceptar los derechistas como el autor de este blog). Esa izquierda al igual que la del primer tipo está fragmentada en varios grupos, pero acepta la idea de un "socialismo de mercado", es decir, uno donde el estado no controle la mayoría sino unos aspectos específicos de la vida económica. Finalmente está una izquierda verdaderamente anti estatal, constituida por los anarquismos de diversa índole. Curiosamente esa izquierda está mucho más cercana de los ideales del liberalismo - término del cual se han apropiado ideólogos chimbos como los neoconservadores en USA, cuya retórica Ruiz emula tan poco originalmente-.
Bueno, yo estúpidamente quisiera hacer creer que la izquierda forma un bloque monolítico porque hubo una época en que veía variantes entre el ecologismo europeo, el totalitarismo clásico, la buena conciencia anarquista (eso es lo que les pasa, que su sueño irrealizable sólo es un adorno), la socialdemocracia, etc., hasta que vinieron hechos conmovedores como la invasión de Kuwait, en la que todos esos angelitos estuvieron de parte de Sadam. Lo mismo que se podría decir de Castro, de Chávez, de las FARC, de Bin Laden y el mulá Omar... Es que no había digamos diez millones de nazis idénticos, cada uno tendría su historia, sus sentimientos, sus motivaciones, sus ideas, sus lealtades, etc., pero al final todos contribuyeron al genocidio.
Éste no es el lugar para explicar que la socialdemocracia europea es perfectamente totalitaria y a raíz de la crisis del Estado de Bienestar ha sufrido una crisis de identidad que la ha llevado a dejar de ser socialdemócrata para convertirse en moderador de sociedades liberales, a la manera de Tony Blair, o en hacer politiquería cuasi criminal, como en el caso de Zapatero, aliado de ETA y de Chávez porque la suma de apoyos regionales le permite obtener mayorías contra el otro partido, al tiempo que resolver los problemas económicos y el desempleo vendiendo armas y barcos al sátrapa. Baste recordar los experimentos de eugenesia de los socialistas suecos antes de 1945, pero sobre todo la tendencia a deificar el Estado, a convertirlo en el reemplazo de lo que fue en la Edad Media la Iglesia, cosa sobre la que en Colombia no se sabe nada ni menos se tiene prevención.
En mi opinión la primera de esas izquierdas es una perversión de la misma, y concluyó en los experimentos fracasados del llamado “socialismo real”. La segunda obedecía a unos ideales muy atractivos y pudo construir a través del estado un modelo admirable de sociedad. El problema, claro está, es que el Estado surgió para servir los intereses del capitalismo, y una vez pasó la coyuntura propicia para que el estado de bienestar surgiera (el terror de la derecha y el capital a la revolución Rusa y al comunismo Soviético) este se empezó a derrumbar. La izquierda fue ilusa al pensar que podía construir el socialismo a través del Estado, además porque el Estado se basa en un principio que es esencialmente anti izquierdista: la coerción. Quizás ahora sea el turno para una izquierda alternativa, de corte anarquista y voluntaria (socialismo voluntario del que hablaba Benjamín Tucker, líder libertario y anarquista del siglo XIX) para combatir el estatismo y el capitalismo, que parecen una sola cosa, mientras sus dirigentes se pretende “liberales y demócratas” (como el señor Ruiz, que apoya a los dictadores de la escuela de las americas, simplemente porque “combatían el comunismo” en nombre de la “libertad”, tal como la entendían los gringos).
Bueno, si el socialismo totalitario es una perversión del socialismo, los socialdemócratas deberían decir qué se hace con Cuba, porque lo cierto es que ahí no hay ninguna libertad ni ninguna posibilidad de elegir a los gobernantes. Pero qué curioso, todos los socialistas defienden ese régimen. No hablemos de Colombia, que es un enclave amazónico perdido y primitivo, sino de Europa. Lo segundo es lo del Estado de Bienestar. Habría que recordar que las políticas keynesianas las empezó a aplicar Roosevelt como remedio a la Gran Depresión, y ese señor no era propiamente un socialista del partido obrero. Esas políticas me hacen a mí pensar que son como un reconstituyente para organismos muy enfermos (pero no para países endeudados y carentes de estructuras productivas y aun de población disciplinada). Sería muy grave que alguien reemplazara la alimentación por reconstituyentes cuando ya no está enfermo. Las políticas keynesianas estimularon la economía en la marginada Escandinavia (que no perdió a su población en la guerra ni sufrió ningún gran retraso tecnológico) y en la Europa de posguerra, pero al final condujeron a un callejón sin salida porque sencillamente la sociedad se burocratizaba día a día. Es lo que sufren hoy los países que no fueron capaces de salir de ellas. En todo caso, el Estado de Bienestar en Europa lo desarrollaron políticos que no eran socialistas como Adenauer, y de no ser por un gran consenso entre los empresarios y el gobierno, tanto en Escandinavia como en Francia y Alemania, no habría sido posible.
La izquierda anarquista dejó de existir en 1939, aunque el esnobismo intelectual la ha intentado revivir una y otra vez. Sencillamente el que no cree en el Estado cree en la propiedad, el que aspira a la rumba con lo ajeno sólo es un delincuente y ciertamente no construirá nada, como ocurrió con muchos anarquistas en la época de la guerra civil española. Es decir, "anarquista" es un término válido como lo definía Borges o como lo defienden los libertarios anglosajones. Siempre y cuando se responda cómo se va a vivir. Pero es algo sobre lo que los extremismos o son delirios del tipo Milicia Michigan o son puro esnobismo.
Y en fin: aparte de los adjetivos no veo ninguna respuesta a mi escrito. Las variantes del socialismo anarquista que se puedan ir descubriendo son escandalosas para una cabeza neoliberal: ¿cómo es que los gringos no han descubierto a Benjamin Tucker? Claro, tampoco los franceses ni los alemanes ni los italianos ni los británicos ni los rusos... ¿Es que el viejo topo se irá abriendo camino hasta coronar la historia con su utopía perfecta en que los funcionarios trabajan gratis, reparten el maná que no le quitan a nadie sino que lo reciben en donación, pues la coerción está prohibida, y todos están felices?
Y respecto a la escuela de las Américas sólo una cosa: ¡qué curioso, en el país donde funciona esa escuela no ha habido en el siglo XX grandes matanzas debidas al Estado, no ha habido denuncias de torturas masivas ni de impotencia ante bandas de criminales que esclavizan a regiones enteras. Algún sentido tendría la coerción del Estado.
Porque ahora toda la izquierda se hace la distraída cuando se habla de Sendero Luminoso, pero llegará el día en que, como dice un personaje del foro de El Tiempo, resulte que Abimael sólo se defendía de los verdaderos terroristas, y en que todas las muertes causadas por esa banda de psicópatas resulten atribuibles a los gringos. ¡Sólo me imagino lo que sería hoy Argentina después de unas décadas de predominio de los guevaristas y trotskistas y peronistas de izquierda!
Pero siempre hay que volver a lo mismo: NADIE NECESITA LECCIONES EN EL EXTERIOR PARA APRENDER A TORTURAR GENTE O A DESAPARECERLA. Cuando no había intrigas gringas y eran sólo los latinoamericanos ocurrió esa belleza de la guerra de la Triple Alianza, en que mataron, por motivos racistas, al 90 % de los varones paraguayos.
Le respondo punto por punto:
“La respuesta de Sergio Méndez está viciada por los usuales hábitos intelectuales del Homo mamertensis”,
Que gracioso, yo tenía entendido que un “mamerto” era un tipo muy específico de izquierdista, usualmente defensor de una de las tantas ortodoxias marxisto-leinistas. Lástima que el señor Ruiz no haya hecho más que usar el término como una forma de descalificar a su oponente, sin ningún argumento o justificación (quisiera que me demostrara como soy un mamerto en algún sentido valido de la palabra…sería un ejercicio divertido, ver al Dr Ruiz hacer las respectivas maromas intelectuales para probar que yo soy un defensor del marxismo-lenisimo).
“el más característico de los cuales es la decretitos”
Miren quién habla…la persona que acaba de decretar que soy un “mamerto”. Debe ser esa fijación gramatical suya, que pretende que la realidad se define a través del uso arbitrario – pero correcto- del lenguaje.
“¿Cuáles son mis mentiras? ¿Cuáles son mis "falsas generalizaciones"?”
1- Pretender que la izquierda es igual que la derecha solo porque pueda concordar en algunos objetivos.
2- Pretender que la izquierda es un ente homogéneo que piensa igual en todas las circustancias.
Esas mismas generalizaciones las repite el Dr Ruiz en su respuesta una y otra vez. Veamos:
“Los enemigos del sistema democrático no tienen las mismas motivaciones ideológicas, pues unos vienen del patrioterismo racista, antisemita y conservador y los otros de la utopía situacionista o de cualquier borrachera de ésas.”
Vaya, asi que toda izquierda que concuerde en algo con Le Pen es “enemiga del sistema demócratico”. Evidentemente no tiene como sustentar semejante afirmación, porque entre otras cosas es FALSA. Hasta donde yo sé, no solo muchos partidos de extrema izquierda o de izquierda radical en Europa juegan y defienden el sistema democrático. También muchos partidos de izquierda moderada han sido sus principales propulsores en Europa. Por eso participan regularmente de las elecciones y cuando son electos no han hecho nada para socavar ese sistema democrático en más de cincuenta años que acabó la segunda guerra mundial.
“Pero en cambio sí tienen las mismas motivaciones sociológicas y aun morales: el mundo exterior con su lógica distinta amenaza igual al sueño de volver con Joseph de Maistre al culto de Juana de Arco y al falansterio cañamoso y orgiástico. A la larga, por los motivos que sean, unos y otros (no los dirigentes, pero sí los votantes) terminan apoyando a Chirac, que es el hombre que podría salvar la situación mediante unos contraticos con Sadam, o con Putin, o con los iraníes, o con los saudíes, o con los chinos...”
Aquí el señor Ruiz simplemente es incoherente. Que demonios está tratando de argumentar , simplemente se escapa a mi comprensión. Inicia con una idea clara “que las motivaciones sociológicas y morales” de la extrema derecha y la izquierda son las mismas. O quizás quiera decir que la derecha y la izquierda EUROPEAS en general tienen las mismas motivaciones (Chirca no es de extrema izquierda). Lo que me da risa, en particular porque parece sugerir que la derecha y la izquierda europeas son igualmente malvadas (e igualmente izquierdosas) en contraposición a la única buena forma liberal de gobierno (en este párrafo es tácito, pero es más claro en el resto del texto) gringa, única decente y buena para Ruiz y sus esbirros. Igual Ruiz jamas nos aclara de manera muy específica cuales son esas mismas motivaciones excepto cuando dice que:
“Tanto la República de Charles Maurras como la Revolución Permanente tienen un enemigo común, el mundo moderno, la triste realidad del declive de Francia, la complicidad general en hechos tan admirables como el genocidio de Ruanda.”
Parece confirmar la idea anterior, lo cual es un argumento que sólo puede surgir de la más honda ignorancia. Desde luego el derechismo de Maurras es anti modernista, pero pretender equipararlo al Trotskismo que inspira la revolución permanente en su anti modernismo es una estupidez que ningún filósofo o estudiante de historia o ciencia política cometería. Claro, es que como la academia es malvada. Pero déjame decirte Dr Ruiz, que el Trotskismo como todo movimiento inspirado en el marxismo es defensor del modernismo. Marx y los comunistas soviéticos eran firmes creyentes en el progreso de la humanidad y en el desarrollos científico y técnico de la sociedad, asi como la progresiva liberalización de las relaciones sociales, implícitas en el desarrollo moderno de la sociedad. Por lo demás es interesante notar que si existe una forma de trotskismo contradictoriamente anti moderna, esa es el neoconservatismo norteamericano que Ruiz tanto adora (si, los neoconservadores son ex trotskistas convertidos a la derecha, con su propia versión de la revolución permanente – la expansión de la democracia y la pax gringa al resto del mundo- que a su vez se han aliado con los sectores más decididamente anti modernos y reaccionarios de la sociedad gringa: los fundamentalistas evangélicos. Pero pedirle tales sutilizas de análisis a Ruiz es como pedirle peras al Olmo).
”Bueno, yo estúpidamente quisiera hacer creer que la izquierda forma un bloque monolítico porque hubo una época en que veía variantes entre el ecologismo europeo, el totalitarismo clásico, la buena conciencia anarquista (eso es lo que les pasa, que su sueño irrealizable sólo es un adorno), la socialdemocracia, etc., hasta que vinieron hechos conmovedores como la invasión de Kuwait, en la que todos esos angelitos estuvieron de parte de Sadam.”
¿En serio? Como sabe ud que todos la izquierda estuvo a favor de Saddam Hussein cuando este invadió Iraq. Eso es, ejem, falso. Al punto que la coalición que Bush formo para luchar contra Hussein incluía muchos gobiernos con sistemas socialdemócratas de Europa, como el de Mitterand y el de Felipe Gonzales. Además, otra vez, Ruiz comete la falacia de confundir los motivos para oponerse a la guerra con “estar a favor de Hussein”. Lógicamente no le cabe en su pequeña cabeza la posibilidad de que alguien pudiera estar en contra de Hussein y de la guerra al mismo tiempo. Con su triste lógica uno tendría que concluir que Gandhi era un ferviente partidario pro nazi por haberse opuesto a la guerra contra Hitler. Por lo demás no está de menos la nota de hipocresía, ver a Ruiz quejarse de que los Europeos hagan pactos con Hussein, e ignorar que Estados Unidos le ayudo al dictador cuando le fue conveniente a sus propios intereses. Lo cual me sugiere la idea de que lo que Ruiz tiene es un patético sentimiento anti europeo y otro pro Yankee, que lo ciega a cualquier análisis objetivo ¿En tu casa comen “Patatas de libertad” en vez de “papas a la francesa” de casualidad?
”Éste no es el lugar para explicar que la socialdemocracia europea es perfectamente totalitaria”
Claro que no, al fin y al cabo como molestarse en explicar teorías que no pueden ser fundamentadas o argumentadas. Decretitos aguda, es mi diagnostico…
“y a raíz de la crisis del Estado de Bienestar ha sufrido una crisis de identidad que la ha llevado a dejar de ser socialdemócrata para convertirse en moderador de sociedades liberales, a la manera de Tony Blair, o en hacer politiquería cuasi criminal, como en el caso de Zapatero, aliado de ETA y de Chávez porque la suma de apoyos regionales le permite obtener mayorías contra el otro partido, al tiempo que resolver los problemas económicos y el desempleo vendiendo armas y barcos al sátrapa.”
Juaaaaa….Si, Zapatero es aliado de ETA y de Chavez..whatever you say man…¿No será que Zapatero ganó porque la gente se “emputo” (si no le gusta la expresión, me importa un carajo) al ver que el otro idiota – que los había metido en una guerra contra la voluntad del pueblo, pero bueno, ahí si la democracia vale huevo- y después les trato de mentir respecto a los atentados del 11 de Marzo, culpando a ETA cuando la evidencia apuntaba a Al Qaeda? Nahhh…que va…
“Baste recordar los experimentos de eugenesia de los socialistas suecos antes de 1945, pero sobre todo la tendencia a deificar el Estado, a convertirlo en el reemplazo de lo que fue en la Edad Media la Iglesia, cosa sobre la que en Colombia no se sabe nada ni menos se tiene prevención.”
Otro poco de ideas inconexas y sin sentido. Que tiene que ver los experimentos de eugenesia con la supuesta tendencia a “deificar el estado” (¿de quién? ¿Los social demócratas suecos? ¿Los social demócratas en general?). Por lo demás desde cuando el estatismo ha sido causa única de la izquierda. La derecha europea ha sido tan pro estatal en todos sus niveles…desde la mas moderada hasta los nazis y fascistas. Pero digamos que la derecha europea es sui generis, que la verdadera derecha, la gringa es anti estatal ¿Lo es? No, no lo es. Desde la derecha tradicional pro racista que creía en un sistema de apetheid y de valores religiosos fundamentalistas, hasta Bush hijo (pasando por Ronald Reagan) quienes llegaron a records fiscales déficit y han hecho crecer el la burocracia estatal (el actual gobierno gringo ha hecho crecer el gasto estatal y la burocracia desde niveles no vistos desde Roosvelt), la derecha siempre se ha mostrado amante del Estado ¿Cómo no, si al fin al cabo el Estado el que garantiza el gasto militar, los subsidios corporativos y el estado policiaco para mantener “el orden”. En cambio en la izquierda si existe una autentica tradición anti estatal, que es la vertiente anarquista. Perseguida por la derecha obviamente, y por la izquierda marxista leninista y maoísta por el otro lado, y con cualquier cantidad de vertientes: coperativismo, mutualismo, anarco sindicalismo, anarco individualismo, socialismo voluntario…Obviamente el señor Ruiz no puede sino descartar la existencia de un tajo, a falta de argumentos…
”Bueno, si el socialismo totalitario es una perversión del socialismo, los socialdemócratas deberían decir qué se hace con Cuba, porque lo cierto es que ahí no hay ninguna libertad ni ninguna posibilidad de elegir a los gobernantes. Pero qué curioso, todos los socialistas defienden ese régimen.”
¿En serio? ¿De acuerdo a quién, ud? Si eso es cierto, porque Cuba ha recibido fuertes condenas de la Unión Europea últimamente ¿Y ud que sabe que piensan los socialistas de la versión anarquistas de Cuba? Otra generalización que no puede defender como cosa rara.
“Habría que recordar que las políticas keynesianas las empezó a aplicar Roosevelt como remedio a la Gran Depresión, y ese señor no era propiamente un socialista del partido obrero.”
¿Y quién dijo que las politicas Keynesianas de Roosvelt se pueden equiparar en si mismas al estado de Bienestar? Políticas de inversión publica para promover el empleo, regulación de los mercados y una miníma red de protección social no ES LO MISMO que el estado de Bienestar.
“Esas políticas me hacen a mí pensar que son como un reconstituyente para organismos muy enfermos (pero no para países endeudados y carentes de estructuras productivas y aun de población disciplinada). Sería muy grave que alguien reemplazara la alimentación por reconstituyentes cuando ya no está enfermo. Las políticas keynesianas estimularon la economía en la marginada Escandinavia (que no perdió a su población en la guerra ni sufrió ningún gran retraso tecnológico) y en la Europa de posguerra, pero al final condujeron a un callejón sin salida porque sencillamente la sociedad se burocratizaba día a día. Es lo que sufren hoy los países que no fueron capaces de salir de ellas. En todo caso, el Estado de Bienestar en Europa lo desarrollaron políticos que no eran socialistas como Adenauer, y de no ser por un gran consenso entre los empresarios y el gobierno, tanto en Escandinavia como en Francia y Alemania, no habría sido posible.”
La pregunta es, claro, porque hay estados de Bienestar que parecen estar mejor que otros. Incluso con la aplicación de reformas liberalizantes de la economía en todos estos paieses, no todos tiene su sistema de bienestar tan comprometidos como otros. Por lo demás es un análisis muy miope pretender que los problemas que afronta el estado de bienestar hoy en día se deben simplemente a una inviabilidad teórica del modelo.
”La izquierda anarquista dejó de existir en 1939, aunque el esnobismo intelectual la ha intentado revivir una y otra vez.”
Otra afirmación elocuente del señor Ruiz, con nada más para sustentarla que aire…Si, la izquierda anarquista es minoritaria, pero eso no quiere decir que haya dejado de existir.
“ Sencillamente el que no cree en el Estado cree en la propiedad, el que aspira a la rumba con lo ajeno sólo es un delincuente y ciertamente no construirá nada, como ocurrió con muchos anarquistas en la época de la guerra civil española. “
¿Qué se supone que quiere decir esta frase? Asumiendo que tenga algún sentido…
“Es decir, "anarquista" es un término válido como lo definía Borges o como lo defienden los libertarios anglosajones.”
Los libertarios anglosajones eran originalmente anarquistas. Hoy por hoy parecen, en gran cantidad, un poco de conservadores excéntricos que “les gusta fumar marihuana”. Es decir, utilizan toda la retórica anti estatal de la derecha para defender los intereses de las grandes empresas o la lógica del capitalismo (que confunden con “libres mercados) es otra cosa. Sin embargo existen libertarios más inteligentes –sospecho yo, una minoría- que están redescubriendo los origenes profundos del libertarianismo en el anarquismo socialista del siglo XIX (si, estilo Benjamín Tucker) y que defienden una sociedad propiamente de libre mercado y cooperativista, no como un truco para promover una economía política de derecha (es decir, no usan el discurso del libre mercado como una “ideología”, al decir de Marx).
Y en fin: aparte de los adjetivos no veo ninguna respuesta a mi escrito. Las variantes del socialismo anarquista que se puedan ir descubriendo son escandalosas para una cabeza neoliberal: ¿cómo es que los gringos no han descubierto a Benjamin Tucker? Claro, tampoco los franceses ni los alemanes ni los italianos ni los británicos ni los rusos... ¿Es que el viejo topo se irá abriendo camino hasta coronar la historia con su utopía perfecta en que los funcionarios trabajan gratis, reparten el maná que no le quitan a nadie sino que lo reciben en donación, pues la coerción está prohibida, y todos están felices?
”Y respecto a la escuela de las Américas sólo una cosa: ¡qué curioso, en el país donde funciona esa escuela no ha habido en el siglo XX grandes matanzas debidas al Estado, no ha habido denuncias de torturas masivas ni de impotencia ante bandas de criminales que esclavizan a regiones enteras. Algún sentido tendría la coerción del Estado.”
¿En serio? ¿Cómo llama ud el genocidio contra los indígenas en el siglo XIX? ¿Pero y que si no las ha habido en USA? ¿Acaso eso cambia que Estados Unidos las promovió afuera de su territorio? Ud sabe mucha gramática, pero de lógica, pocon pocon…
“Porque ahora toda la izquierda se hace la distraída cuando se habla de Sendero Luminoso, pero llegará el día en que, como dice un personaje del foro de El Tiempo, resulte que Abimael sólo se defendía de los verdaderos terroristas, y en que todas las muertes causadas por esa banda de psicópatas resulten atribuibles a los gringos. ¡Sólo me imagino lo que sería hoy Argentina después de unas décadas de predominio de los guevaristas y trotskistas y peronistas de izquierda!”
Eso, siga evadiendose del hecho central – lo que hicieron los Estados Unidos- y siga justificando lo que hicieron en America Látina.
”Pero siempre hay que volver a lo mismo: NADIE NECESITA LECCIONES EN EL EXTERIOR PARA APRENDER A TORTURAR GENTE O A DESAPARECERLA. Cuando no había intrigas gringas y eran sólo los latinoamericanos ocurrió esa belleza de la guerra de la Triple Alianza, en que mataron, por motivos racistas, al 90 % de los varones paraguayos.”
Primero que todo yo nunca dije que en la escuela de las Ameritas los entrenaran para “torturar a la gente”. Igual su afirmación es falsa, porque existen técnicas de tortura que se pueden enseñar (los nazis por ejemplo fueron innovadores con su GESTAPO en esas técnicas) y técnicas para aterrorizar a la población que la CIA desarrolló y pasó luego en pequeños manuales por ejemplo a los Contras. Ah, y los mamertos comunistas que se “inventaron” está mentira, eran los miembros del congreso de Estados Unidos. Seguramente las investigaciones que hicieron respecto al escándalo Iran Contras era todo parte de una estrategia del comunismo internacional para desacreditar a tus amados Estados Unidos. Y por último, averigua que tuvo que ver Inglaterra en la guerra de la triple Alianza contra Paraguay…es una historia interesante :P
Para Sergio Méndez:
Ya esto se hace espantosamente largo, intentaré resumir un poco.
Mamerto Es un término que se parece a yankee, que para mucha gente es "estadounidense" pero para alguien de New Hampshire es "alguien de Vermont", y en Vermont los yankees son los de la capital. Pero yo no juzgo máscaras, no creo que un fecodista serpista sea muy distinto de un fecodista trotskista. El mamerto es una condición social, la de quien pertenece a la casta sacerdotal en Colombia, que por fuerza es dado a imaginar paraísos y a olvidarse de las fuentes de sus ingresos, que da por supuestas. Es una forma de ser que nace del clero colonial (tengo que insistir sobre eso en un post) y que copia todos sus hábitos, salvo el de algodón. Las utopías son como los rezos, y aquellos que las tejen muy finas son como los obispos, y tal vez den clases en universidades públicas con ingresos de obispos. ¿Qué importa si se ponen velitas a san Mao o a san Marcuse? Lo que importa es que el mamerto es un reaccionario ligado a la defensa del orden social tradicional y enemigo natural de quien piense mejorar las cosas trabajando. Sobre todo de que esas personas tengan algún poder político.
Izquierda y derecha Puro fetichismo. Hoy en día la izquierda es Al-Zarqaui y sus jaleadores, sobre todo en Europa y Latinoamérica. No es que sea igual, es que el fascismo clásico es tan irrelevante que se suma a las huestes antiglobalización del mismo modo que los nietos del godo Rojas Pinilla van detrás de Dussán y Petro.
Diversidad de la izquierda Contestado en el primer punto: da igual que el gato sea blanco o negro siempre y cuando cace ratones, da igual la utopía, siempre y cuando el sueldo esté ahí al final de mes, el servicio sea dócil y los primos estén bien situados.
Izquierda y sistema democrático Por ejemplo Wilson Borja no quiere destruir el sistema democrático, sobre todo si las FARC fueran vencidas, no tendría ningunas ganas de acabar con el sistema democrático, respecto de lo cual son como los nazis amenazados de caer bajo sistemas comunistas. Como era demócrata Allende. ¿Son o no enemigos del sistema democrático los que se oponen a que los iraquíes, los afganos, los cubanos o los colombianos elijamos a nuestros gobernantes? Ellos defienden el sistema democrático en sus países porque son minoría, en cuanto no tienen que jugarse nada, intentan destruirlo o impedirlo. Incluidos los socialdemócratas.
Eso queda claro con el caso de la invasión de Irak: todos en Francia y Alemania rodean a Chirac y Schroeder alrededor del "obvio" pacifismo (antiamericanismo: cuando Ruanda no dijeron nada), pero todos se benefician de los contratos privilegiados que esos señores firmaban con Sadam, y eso por no mencionar a Mobutu y a otro montón de ladrones africanos aliados de Francia. Parecen de la clase social mamerta, hablan y hablan de geometrías políticas pero en la realidad unos y otros tratan de impedir que los iraquíes sean libres y elijan a sus gobernantes, y aplauden a los terroristas que los masacran.
Progreso y reacción Es tonto decir que el trotskismo es modernismo cuando su utopía ha mostrado ser tan opresiva como el nazismo. También Maurras proponía su progreso, y Maistre y todos. La reacción sólo plantea volver a un punto de partida anterior para tomar por otro camino, igual el trotskismo que el fascismo de Le Pen. El apego a utopías caducas es en la realidad, fuera de las horas de dulce ensueño utópico (pagado, como en Colombia) puro apego al pasado.
Neocons Sin duda hay trotskistas convertidos en neoconservadores en EE UU, pero allí nunca hubo muchos trotskistas. Es normal que tras la caída del comunismo ascienda un proyecto de extensión de la democracia a todo el mundo, y al mismo tiempo que eso despierte resistencias. Es donde entra Le Pen, que forma parte de eso mismo aunque su formato sea otro que el de los agremiados (es decir, que el del gremio de maestros, protagonista de todos los delirios totalitarios y sin duda dominado por la extrema izquierda en Francia).
Reacción y religión Típico mamerto es creer que los cristianos o mormones o adventistas o adeptos de la ciencia cristiana son gente más antigua y más reaccionaria que los comunistas. Mientras que buena parte de la tecnología moderna la han desarrollado esas personas, los izquierdistas latinoamericanos sólo han generado opresión, incluso cuando son de clase tan alta que hasta los gobiernos de derecha les pagan buenos sueldos para que tejan paraísos de cháchara.
Contra Sadam y contra Bush padre En el caso de la guerra del Golfo, los gobiernos socialdemócratas apoyaron la intervención pero sus militantes la rechazaban. Pura Realpolitik. Eso sí, a favor de Sadam no había nadie. Es mi problema, que todavía no encuentro a ningún partido que esté a favor de la corrupción ni de la desigualdad. El apoyo a Sadam, siempre mínimo y desesperado, de EE UU en tiempos de la guerra fría sólo servía para evitar que la región cayera en manos soviéticas. Es que en Latinoamérica la clase social mamerta estaba a favor de Brezhnev del mismo modo que sus padres estaban a favor de Hitler. El rechazo a EE UU como modelo de sociedad en que se pierden los referentes, las seguridades, etc. es algo que procede de antes del surgimiento de ese país, del odio a los colonos cuáqueros y puritanos que eran tan admirados en Europa como despreciados eran los españoles y criollos de América. Es que el esclavismo tiene que defenderse de algún modo. El comunismo es un disfraz perfecto de esa defensa: Cuba es el modelo.
Zapatero y ETA Una cosa son las causas del triunfo de Zapatero y otra lo que ha hecho desde que gobierna. Su triunfo se debe al atentado terrorista, es el premio al terrorismo, el triunfo de los terroristas, que buscan eso, que la gente se asuste y apoye a los candidatos que los van a complacer. Pero como gobernante ha empezado a negociar con ETA y a darle fuerza a sus aliados, como los republicanos catalanes, con cuyos votos parlamentarios gobierna. Y España nunca participó en la guerra de Irak, las tropas nunca combatieron ni fueron a combatir. El problema era el apoyo político de Aznar a Bush.
Eugenesia y estatismo La exclusión de personas por supuestamente llevar taras genéticas es un crimen que llevaron a cabo los nazis, y en la misma época los socialdemócratas suecos hacían lo mismo. Más allá de eso, la retórica de la mayor parte de la izquierda europea es la de la expansión hasta el infinito del poder de la burocracia. No saber eso sí que es terrible.
Derecha y estatismo En EE UU hay un instinto muy marcado entre la gente, pobre o rica, a rechazar los impuestos y a desconfiar del gobierno. ¡A tal punto que organizan guerrillas para que el gobierno no vaya a joderlos! En Europa hay una tradición liberal, la de pensadores como Hayek y políticos como Thatcher, que en la nomenclatura de las mentes mamertas es igual "derecha" como los socialistas nacionalistas de Hitler y Mussolini.
La izquierda y Cuba Todos los partidos de izquierda en Europa defienden a Cuba, a tal punto que el gobierno español y sus aliados latinoamericanos firmaron esta semana una declaración condenando el inexistente bloqueo. Otra cosa es que algunas veces firmen exigencias de derechos humanos por no perder votos. Una cosa es lo que hace un gobierno y otra lo que piensan los militantes de sus partidos. Y con todo, la mayor parte de la izquierda francesa es distinta al Partido Socialista y no ha estado nunca en el poder.
Los verdaderos libertarios Los anarquistas son los productores de pasteles de boda más ridículos que ha habido en la historia. Casi todos son profesores de bachillerato y en general funcionarios estatales de ese nivel, aunque en Colombia el nivel es tan penoso que por esnobismo habrá gente así en las universidades. En la inanidad de sus "propuestas" son lo más parecido que hay a la clase mamerta colombiana, aunque no pueden ni quieren mandar niños a matar gente para hacer carrera política.
El Estado de Bienestar El que escriba esta frase y se queje de que lo llamen mamerto necesita volver a la universidad:
Por lo demás es un análisis muy miope pretender que los problemas que afronta el estado de bienestar hoy en día se deben simplemente a una inviabilidad teórica del modelo.
Eso, el adjetivo, "miope". La experiencia demuestra que la hegemonía estatal en la economía es ineficaz y por eso todos los países que han alcanzado la prosperidad son liberales. Los escandinavos tienen un enorme Estado de Bienestar, pero ¿son más ricos que Suiza? ¿Cuántas rentas les llegan de sus multinacionales presentes en medio mundo a los suecos? ¿Y a los noruegos del petróleo?
ESTO: (yo)Sencillamente el que no cree en el Estado cree en la propiedad, el que aspira a la rumba con lo ajeno sólo es un delincuente y ciertamente no construirá nada, como ocurrió con muchos anarquistas en la época de la guerra civil española. (Sergio): "¿Qué se supone que quiere decir esta frase? Asumiendo que tenga algún sentido."
Por increíble que parezca, esa frase quiere decir lo que dice. La culpa de no entender algo no es del emisor, eso ocurre en el bachillerato, donde el profesor descalifica el escrito de su alumno porque le parece que está mal planteado. Y es que la libertad + la justicia social sólo es el nombre de una rumba. Ya decía Goethe que quien promete libertad e igualdad al mismo tiempo ha de ser un insensato o un charlatán, pero más exactamente es un profesor de bachillerato que se adorna de cualidades intelectuales que no le cuestan nada.
EN FIN: Hace usted grandes esfuerzos por confirmar lo que digo, como sus respuestas al tema de la guerra de la Triple Alianza. ¿Mandaron los británicos a los brasileños y argentinos a masacrar a los paraguayos? Un par de décadas faltan para que los muertos de Sendero Luminoso sean culpa de los gringos, del mismo modo que los crímenes de la década de los cincuenta se cargan al Estado y exculpan a los principales asesinos, que eran los rústicos y bandidos montaraces que le hacían la carrera política a los jefes liberales y comunistas, siguiendo una vieja tradición nacional.
Es asombroso que ud pretenda que su respuesta sea "resumida". Mas asombroso es ver como en ese larguero que pretende un resumen, no diga absoultamente nada, excepto volver a decir lo que con las mismas palabras ya había dicho.
Sin embargo hay dos partes de su respuesta que son dignas de resaltar: cuando dice que "Al Zarqawi es la izquierda" y cuando insiste en que el trotskismo no es un movimiento modernistas porque produjo opresión. Creo que son pruebas contundentes - y eso que hay muchas otras- de que ud no tiene ni idea de lo que habla o que me está tomando el pelo (y entonces el lunatico soy yo por ponerme a discutir con ud: mea culpa).
P.S: En cuanto a su apología sobre Estados Unidos ("apoyo minímo y desesperado.."pobrecitos los gringos, que les toco apoyar a Saddam) es tan ridicula y carente de ética que no da ni para comentarla.
Para Sergio: más prueba de que usted no sabe leer. El trotskismo hoy en día no es modernismo porque es una utopía caduca. Los trotskistas son gente asustada por la vida moderna que quisiera volver a su juego en que no tenían todo eso tan complicado de ahora.
Todos los izquierdistas que conozco justifican el terrorismo en Irak. Es curioso. Todos se creen con derecho a opinar por los iraquíes y se oponen a que vayan y voten y elijan a sus gobernantes.
Y ciertamente el triunfo estadounidense en la guerra fría es un gran acontecimiento. No faltaría más sino una tiranía orwelliana concentrada en Moscú, Pekín y algún otro centro de tortura.
Pero no se preocupe: usted no es lunático sino un colombiano más que salió hace poco de una universidad de elite colombiana. La gente de un país civilizado lo comprendería muy rápido, y a lo mejor usted cuando hayan pasado varias décadas, SI NO PROSPERA FÁCILMENTE GRACIAS A SUS CONTACTOS, verá a Colombia con sentido crítico (ya sé que cree que mira a Colombia con sentido crítico, pero sólo reproduce los tics de las castas parásitas tradicionales). Por eso lo sorprende todo lo que yo le digo.
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