7 oct 2013

El proceso de paz es un concierto para delinquir agravado

Por @AdasOz

Sí, estimados lectores, dejemos de usar términos suaves y comencemos a llamar las cosas por su nombre. Empecemos, a partir de ahora, a denunciar ante el mundo que lo que sucede entre La Habana y la Casa de Nariño es, sin lugar a dudas, un concierto para delinquir agravado.  

El concierto para delinquir se reconoce por tres factores: primero, cuando existe de manera permanente una organización cuyos objetivos son de carácter delictivo. Segundo, cuando sus miembros se hayan organizado voluntariamente con un objetivo común; y tercero, que dicho objetivo ponga en peligro la seguridad pública. Ahora bien, este delito se considera agravado cuando se concierta para cometer delitos como secuestro, narcotráfico, genocidios, violaciones y todo tipo de torturas. Es decir, que se crean como organización para cometer delitos de lesa humanidad. (Información tomada de Wikipedia)

Muchos de ustedes pensarán que, en efecto, he descrito perfectamente a las FARC, porque a nadie le cabe la más mínima duda de lo que hacen estos criminales. Sin embargo, identificar a los intelectuales y criminales de escritorio, resulta mucho más complicado. Así que soy consciente de que muchos de los que me leen me cuestionarán fuertemente por involucrar al gobierno DENTRO de la organización que concierta para delinquir con carácter agravado, dentro y fuera de Colombia.  
¿Cómo no pensar que lo que sucede entre La Habana y la Casa de Nariño es un concierto para delinquir agravado, si mientras las FARC continúan con su accionar criminal el fiscal general sale en su defensa y en la de los funcionarios cómplices? Parece que al “honorable” fiscal no le resultó suficiente haber prevaricado en favor de las FARC al levantarles las circulares rojas de la Interpol sino que casi que se atreve a afirmar que sin éstas, los terroristas de las FARC dejaron de serlo, y por consiguiente, los funcionarios públicos que viajen a reunirse con ellos no cometen delito. Haberles permitido escapar del país al secretariado de las FARC y a sus respectivas "mozas" es en sí un delito, así como lo es impedir que el curso de las investigaciones contra estos criminales se lleve a cabo, todo esto, bajo pena de cárcel.  

Ahora bien, los funcionarios públicos que viajan a La Habana, con o sin permiso del presidente, a reunirse con las FARC también cometen delito y deberán ser investigados por ello. Para resumirlo, reunirse con organizaciones ilegales es en sí ilegal. Es un delito flagrante que tiene pena de cárcel igual que el de la parapolítica, pero que por arte de magia termina siendo excusado por el fiscal de las FARC. Las declaraciones de Montealegre lo convierten en cómplice porque colabora con los fines políticos de un grupo ilegal que se vale del terrorismo como manera de chantaje para usurpar el poder y enquistarse en él por mucho tiempo. No se alarmen cuando el fiscal dice que los "acercamientos" tienen fines altruistas, pues la CSJ ya lo había afirmado previamente, dejando toda evidencia de que el Poder Judicial está en manos del narcoterrorismo. Bien que nos hace el Procurador Alejandro Ordóñez al investigarlos a todos, porque fiscal es lo que nos hace falta.  

¿Y cómo no pensar que lo que sucede entre La Habana y la Casa de Nariño es un concierto para delinquir agravado, cuando el mismo presidente avala el accionar terrorista de las FARC al permitirles tomar decisiones cruciales sobre Colombia pese a que no deberían tener representación política? Pues déjenme decirles que es el mismo Santos quien los representa. Su mismo gobierno se ha encargado de gobernar por y para ellos, y el clamor de todo un pueblo por derrotarlas y por someterlas a la justicia no quedó en el olvido sino enterrado en una fosa común, de esas que jamás menciona Iván Cepeda.  

En sus más recientes declaraciones, el presidente Juan Manuel Santos dijo lo siguiente:  
"Que vamos a permitir que el día de mañana las FARC sean un partido político. Pues de pronto sí. Es que de eso se trata la paz. La paz no la estamos negociando con los amigos, es con los enemigos de 50 años. Y que dejen su lucha armada y que continúen su lucha pero con los argumentos, con las palabras, dentro de la democracia. Para ello se negocia la paz."
Como quien no quiere la cosa, Santos ya legitimó los crímenes de las FARC, porque “de eso se trata la paz”. Por supuesto, se trata de engañar incautos con una falsa paz que busca abiertamente sacrificar la justicia para premiar terroristas y entregarles el poder. Una vez las FARC cumplan su objetivo, esos “argumentos” de los que habla el presidente se podrán resumir en la imposición de un proyecto político totalitario y sanguinario que se apoderará de todos los estamentos del Estado y que planea perpetuarse en el tiempo. Mal haríamos en confiar en que las FARC actuarán democráticamente y que aceptarán la alternancia de poder una vez lo controlen en su totalidad, a sabiendas de que los gobiernos garantes son el cubano y el venezolano, bien conocidos por ser antidemocráticos y criminales.  

No hay otra manera de describirlo y explicarlo mejor, estimados lectores. Lo que sucede entre La Habana y la Casa de Nariño no puede tener otro nombre diferente al de concierto para delinquir agravado, pues éste es el gobierno de las FARC y todos los colombianos tenemos el deber de denunciarlo con nombre propio dentro y fuera de Colombia. Mi invitación es para que dejemos de ponerle arandelas al proceso de claudicación y lo pongamos al descubierto, pues quizás así podamos evitar una debacle peor.

1 comentario:

Unknown dijo...

Excelente !!.Vivo en Londres desde hace 9 años y mis deseos de regresar a mi pais se ha truncado desde que inicio este siniestro y criminal gobierno de Juan M. Santos
Su oscuro accionar con los terroristas Farc en su CRIMINAL PROCESO DE PAZ ,me ha llenado de una profunda indignacion y rabia,con un panorama de un pais marcado a diario por crimenes ,secuestros ,asesinatos,desempleo y boleteo y vacunas a tiendas por criminales en los barrios mas pobres ,solo espero que Juan M Santos pague algun dia en una oscura y nauseabunda prision todo el daño que le ha causado a mi pais por sus vinculos disfrazados de paz con terroristas y asesinos Farc y,asimismo espero tambien ver a todos estos asesinos y terroristas Farc con sus altos colaboradores del Estado,de hecho traidores de la Patria,al frente de un peloton de fusilamiento y verlos caer lentamente bajo el peso de su terror,crimenes y asesinatos cometidos contra los cuidadanos de Colombia desde hace mas de 50 años !!!